martes, 20 de enero de 2009

La sublimación y el reemplazo del amor

El asunto de hoy comienza temprano por la mañana, en una visita que hice a la dietética (y si… el “empiezo el lunes” a veces se convierte en martes… ya conocemos esa postergación). Allí, inspeccionando, me di cuenta como los naturistas, los integrales, reemplazan en cierta forma el sabor del chocolate por el de algarroba. Así, uno puede elegir entre brownies, budines, galletitas, que parecen de chocolate pero no lo son…

Así, comenzó el dilema con la analogía instantánea:

¿Qué cosas hacemos para reemplazar el amor?

¿Y para reemplazar el sexo?

¿Con qué tapamos esa energía de deseo de alguien que nos diga cosas bellas al oído y nos tome la mano mientras hacemos cucharita?

En el psicoanálisis, Sigmund Freud introdujo el concepto de SUBLIMACIÓN. La sublimación es uno de los mecanismos de defensa de la psiquis, que consiste en cambiar el objeto pulsional, del deseo, del sujeto por otro objeto, desexualizándolo. La sublimación es como una forma de engañar a nuestra consciencia para llevar a cabo el deseo sublimado. De esta forma se deriva el deseo y se realiza, o se intenta, por otro camino….


Así, comenzó el estudio psico-sociológico:

¿Qué cosas hacemos para “sublimar” esa energía sexual y/o amorosa a la cual nuestra soledad no permite dar rienda suelta?

La primer respuesta, obvia en el momento del dilema, era “ir a la dietética y comprar comida que nos haga sentir mejor”… pero abrimos los canales de comunicación y preguntamos a muchos conocidos y queridos de la mutual.

Aquí, hoy, compartimos muchas de las respuestas:

- Primero, lo básico. El autoerotismo. Sin embargo, creemos que no reemplaza nada ya que es algo que debería acompañarnos a lo largo de la vida (¿o no? Ya tenemos para una nueva entrada…).

- El preferido de casi todos. La comida. Los atracones. La compulsión. ¿El mayor exponente y más votado? El cuartito de helado… cada caloría ingresada en el cuerpo se siente a veces hasta mejor que el sexo y el amor juntos. Además, algunos de quienes optan por el helado juran sentir que el frío “apaga ese fuego interno que está al borde las llamas”.

- El gimnasio. En todas sus formas, estilos y movimientos. Allí, podremos sentir la descarga física a todo trapo. Casi como tener sexo. “Casi como”… salvo que ir al gimnasio es, para el 95% de quienes respondieron esto, un sufrimiento la mayoría de las veces…

- Salidas con amigos. Muy difícil no convertirlas en una búsqueda de la cita perfecta, en que no sean “salidas de levante”. Pero siempre repetiremos: ¿Quién nos entiende mejor que nuestros amigos? Los grandes reemplazantes del amor… compañeros de vida. Base de esta mutual… sino, nadie podría salir adelante…

- Para los potentados: Adicciones. Todo vale en la búsqueda de algo que tape nuestra soledad. ¿El cigarrillo? Un simple básico. ¿El alcohol? Un posible ridículo con final resacoso que nos recuerde aún más la soledad. ¿Drogas? Para aquellos con más poder adquisitivo… pero aquí en este blog no apoyamos esta opción última (solo reflejamos los resultados de nuestras investigaciones). La situación actual de la economía, sabemos que no ayuda en lo más mínimo a nuestros corazones solitarios… ¡es tan difícil sublimar sin gastar dinero!

- Ir al cine. Leer un buen libro. Lo que por ahí llamaríamos “hobbies”. Escuchar muchas personas respondiendo esto, no podemos dejar de decir, que ¡¡¡nos sorprendió bastante!!!. Y encima los muy incrédulos dijeron que “hacerlos solos es mejor”… ¡no se los cree nadie! ¿para qué leen esto sino?.

- Para los más adinerados aún. El tarjetazo. Las compras compulsivas. Ropa, objetos, cds, dvds, todo puede ser en esta opción… Sin duda creemos que es un alto tapador de angustia… ¡esperen quietitos su aguinaldo y prueben hacerlo! ¡100% resultados efectivos! Más que una opción, ¡una receta infalible!

- Seguir series extranjeras o programas de televisión. A veces puede bordear el índice de salud, pero muchas veces no… Conocemos gente sola que hasta se va de un encuentro social (posiblemente exitoso para encontrar el amor) por ser la hora de su programa favorito… o peor aún, ¡¡¡volver loca a la madre u otras personas para que se lo grabe!!! ¡Así, no!

- Uno de los peores: la adicción al trabajo. “Workoholics”.Este nadie lo dijo espontáneamente, ya que por lo general quienes ejecutan esta opción, no son claramente concientes de la energía sublimada y sublimante… ¡Muy terrible! Sabemos todos que es imposible la siguiente ecuación:

energía sexual o amorosa = energía laboral…

- Cursos de toda índole. Y no sólo hace referencia a cursos de autoyuda o sectas varias. Cursos de pintura, artes, cine, poesía, computación, idiomas, etc… ¡TODO VALE!! Sin embargo, creemos que es una de las opciones más saludables, ya que ingresar a un nuevo entorno… implica gente nueva y la posibilidad de resolver, de una vez por todas, nuestra soledad….

Muchas más podían ser las opciones…

¿Se les ocurre otra que no hayamos contemplado? Hagan sus aportes… Y hagan también un mea culpa y piensen, reflexionen:

¿Es factible la sublimación de todo esto que nunca sucede y tanto deseamos? ¿Son reemplazos válidos?

No desesperen quijotes, y sólo por hoy, sigamos pensando que los molinos de viento, son malignos gigantes contra los cuales seguiremos luchando para ser felices…

2 comentarios:

Natalia dijo...

y si no queres subliminar?
o queres subliminar por momentos?

el amor tiene muchas preguntas

Anónimo dijo...

Está también la opción que podríamos denominar "naturalista". Consiste en golpear ramas del mayor tamaño posible, hasta deshojarlas. Aconsejo practicarlo de a dos, si no podemos apoyarnos en un tronco.